Cómo se hacen las asambleas
La asamblea es una estrategia verdaderamente fácil de implementar pues no requiere recursos diferentes de los que disponemos habitualmente en el aula: un espacio compartido, un mobiliario que nos permita agruparnos cómodamente, una serie de roles y unas cuantas normas fáciles de implementar.
Hace unos días analizamos la asamblea como recurso didáctico para primaria, su enorme potencial, las diferentes finalidades para las que podemos utilizarlas y una serie de usos en las diferentes áreas de la etapa, ya que la asamblea es mucho más que un recurso para la tutoría.
Ahora vamos a ver los diferentes elementos de la asamblea y cómo la vamos a introducir en la programación de las oposiciones.
Contents
Diseñando la asamblea
Roles
En cada asamblea debe haber al menos un moderador que controla la dinámica de la asamblea, también puede facilitar la toma de decisiones o los acuerdos.
Pueden o no ser la misma persona y no siempre tiene que ser el docente el que asuma esta función, al contrario conviene que los alumnos también aprendan a moderar.
El resto de participantes pueden también asumir otras funciones como gestionar el turno de palabra, la redacción de actas (cuaderno de la asamblea), la organización del espacio o el control del tiempo de participación de cada uno de los integrantes, según sea o no necesario.
Los alumnos deben ir rotando por los diferentes roles.
Herramientas para la gestión de la asamblea
Necesitaremos tener un objetivo para la asamblea, de qué va a tratar u orden del día; un espacio en que realizarla, en el propio aula o no.
Pueden realizarse asambleas en lugares más formales como un salón de actos, o al revés, más informales como un rincón del patio, dependerá del tipo de asamblea que queremos realizar; actas, resumen de lo tratado o acuerdos alcanzados y un archivo donde guardar dicha documentación.
Normas para su realización
Por supuesto tendremos que acordar las normas que permitan el adecuado desarrollo de la asamblea: turnos de palabra, intervenciones alineadas con el tema a debate, respeto a todas las opiniones y comentarios evitando los ataques personales.
También es importante no acaparar el tiempo y permitir la participación de todos los componentes, decisiones por consenso o por mayoría, respeto a los acuerdos, etc.
Organización
Las asambleas deben respetar una estructura en la que se empieza por dar la bienvenida y exponer el tema sobre el que se va a trabajar o debatir o el objetivo que se pretende conseguir; un tiempo central de debate, exposición y contraste de ideas, una toma de decisiones o acuerdos y una parte final en la que se abre un espacio para otros temas que puedan surgir y se cierra y se despide la asamblea.
Lógicamente en cada caso habrá que adaptar la asamblea a las características de los alumnos.
Por ejemplo la duración deberá ser menor para los pequeños (hasta media hora de primero a tercero) y hasta una hora en los cursos superiores; la preparación no será la misma si los alumnos ya tienen experiencia en asambleas; con los pequeños tendrá que ser más dirigida y a medida que los alumnos sean más autónomos irán asumiendo el papel de moderador y tendrán sus propias propuestas, etc.
Y no te olvides de evaluarla como cualquier otra actividad que realizas en el aula: cómo ha funcionado, si estaba bien organizada, cómo ha sido tu participación, si han participado todos los alumnos, si se han alcanzado los objetivos previstos, etc. y de este análisis seguro que tendrás propuestas para mejorarla.
Puedes utilizar una guía de observación o una rúbrica para facilitar la recogida de datos que necesitarás para esta evaluación.
Si quieres puedes puedes descargarte un modelo de cada uno de estos documentos compartiendo este post con los botones de las redes sociales siguientes.
Cómo las podemos introducir en la programación de las oposiciones
Como con el resto de recursos metodológicos que decidas emplear en tu programación para las oposiciones tienes dos formas de incluirlos:
- En el cuerpo de la programación, explicando en el apartado de metodología el por qué de tu elección, en este caso, las asambleas y cómo las vas a utilizar en tus diferentes unidades didácticas,
- En las UUDD, con alguno de los usos que hemos comentado: introducir nuevos contenidos, decidir qué queremos aprender y cómo vamos a hacerlo, resolver conflictos, establecer normas del aula, analizar problemas y buscar soluciones, etc.
En función del tu área habrá un tipo de asamblea que te resulte más adecuado que otro, elige la que consideres más adecuada y decide qué función cumplirá en tus unidades didácticas.
Si decides hacer una estructura común para todas tus unidades, cambiando en cada caso los contenidos a trabajar y las actividades más adecuadas según el caso, te aseguras de que sea cual sea la unidad que expongas tendrá todos los recursos didácticos que has decidido seleccionar.
Además de facilitarte enormemente tanto el trabajo de diseño de las unidades didácticas como el esfuerzo de su memorización para la exposición.
Véndesela al tribunal
Para terminar un consejo importante.
No basta con incluir propuestas más o menos atractivas en tu programación, lo que les da valor es que sepas justificar por qué las has elegido, qué finalidades buscas con ellas, qué valores transmiten, cómo las vas a llevar a la práctica, qué materiales necesitarás, cómo organizarás a los alumnos, de qué manera evaluarás su utilidad para los objetivos que te habías propuesto, etc.
Introduce la asamblea en tu programación y no te olvides de explicar su función dentro de la gestión del aula, demostrar una buena gestión del aula dice más de ti como docente que muchas propuestas vistosas.
En toda esa justificación es donde se demuestra tu dominio de las estrategias docentes. No desperdicies la ocasión 🙂