¿Qué pasa con la repetición de curso con la LOMLOE?

La repetición, ¿es un derecho de los alumnos o un castigo?

Cómo hemos comentado en varias ocasiones anteriores uno de los objetivos de la reforma introducida por la LOMLOE es reducir el número de alumnos que repiten curso.

Las evaluaciones y análisis nacionales e internacionales demuestran que el número de alumnado que repite es inusualmente alto en España respecto de países de nuestro entorno, que es una media muy cara, que no suele mejorar los aprendizajes de los alumnos sino que por el contrario es un predictor asociado al fracaso escolar y que perjudica especialmente a los alumnos con niveles socioeconómicos y culturales bajos, por lo que además de ineficiente es una medida totalmente inequitativa.

Si te interesa conocer los datos sobre la repetición te recomiendo el informe «Repetir no es aprender. Mitos desmentidos y alternativas posibles a una práctica ineficiente e inequitativa» elaborado por Save the Children.

En este informe se demuestra con datos la inutilidad de la repetición de curso y se desmontan falsas percepciones que se tienen con frecuencia sobre esta medida muy asentada en nuestro sistema.

Por todo ello cuando los alumnos encuentran dificultades en su proceso de aprendizaje y no logran los objetivos propuestos hay que utilizar otro tipo de medidas y reducir al mínimo posible la repetición de curso, especialmente en los entornos socialmente desfavorecidos.

Vamos a ver cuáles son los criterios para decir si un alumno repite o promociona actualmente y cuáles son las medidas ordinarias (que deberán ser suficientes, adecuadas y personalizadas) que habría que aplicar antes de recurrir a una excepcional, como es la repetición, para conseguir el éxito de todos nuestros alumnos.

Cuándo se puede repetir de curso con la LOMLOE

Aunque ya hemos hablado antes de los cambios en la evaluación y promoción introducidos por la LOMLOE vamos a repasar rápidamente lo relativo a la repetición.

En el actual marco normativo solo se puede repetir una vez en la etapa de Primaria (y dos en total en la enseñanza básica, que recuerda, incluye la ESO). Excepto los alumnos con necesidades educativas especiales que pueden permanecer un curso más de forma excepcional en el conjunto de las dos etapas.

Educación Primaria

La decisión sobre la promoción se tomará de forma colegiada por el equipo docente al finalizar cada ciclo de Educación Primaria. Es decir solo se puede repetir en los cursos pares de la etapa: 2º, 4º y 6º.

La LOMLOE ha introducido un artículo, el 20.bis, en el que se establece que se debe dar una atención especializada a los alumnos y establecer mecanismos de apoyo y refuerzo para evitar la repetición escolar, particularmente en entornos desfavorecidos.

Educación Secundaria Obligatoria

En el caso de la ESO se puede repetir una vez si ya se ha repetido en Primaria, dos si no ha repetido y excepcional en 4º podría volver a repetir un alumno que ya hubiera repetido si de esta manera estuviera en condiciones de titular (en este caso se prorrogaría un año más la edad máxima de permanencia en la etapa hasta los 19).

En esta decisión colegiada tendrá especial consideración la opinión del tutor o tutora, aunque lo ideal es que las decisiones se tomen por consenso. Y no está en función del número de asignaturas suspendidas sino cuando se considere que que podrá seguir con éxito el curso siguiente y que la promoción le beneficiará en su evolución académica.

Los alumnos con una o dos suspendidas promocionarán automáticamente .

Al acabar 2º se entregará a cada alumno un consejo orientador con la propuesta que se considere más adecuada para continuar: tercero, un PDC o un ciclo formativo de grado básico.

Los alumnos con necesidades educativas especiales podrán repetir una vez más en la enseñanza básica, es decir, una repetición adicional en Primaria o en Secundaria (ver el artículo 75 de la LOMLOE).

Planes de refuerzo

Un aspecto que no es novedoso, pero en el que siempre hay que insistir es que tanto si el alumno repite curso como si promociona pero con aprendizajes pendientes, es labor del equipo docente tomar medidas y organizar los apoyos que sean necesarios para que el alumno pueda superar sus dificultades.

Es decir, que no basta con repetir, sino que en todo caso hay que ayudar al alumno a conseguir el desarrollo adecuado de las competencias correspondientes.

Por tanto hay que diseñar un plan específico de refuerzo para cada alumno con todas las medidas que se consideren necesarias para que supere las dificultades que haya encontrado en su aprendizaje.

Y cada final de ciclo de Primaria se debe elaborar un informe sobre el grado de adquisición de las competencias indicando las medidas de refuerzo que pudieran ser necesarias para el ciclo siguiente.

No olvides que antes de la repetición hay que haber agotado todas las medidas ordinarias ya que la repetición es una medida excepcional según la ley (art.20).

Cuáles son esas medidas ordinarias que hay que utilizar para evitar la repetición

Todos las conocemos, aunque no siempre se pongan en marcha.

Se trata de individualizar el proceso de enseñanza teniendo en cuenta las necesidades de cada alumno y dando a cada uno la respuesta educativa que necesita para superar sus dificultades o alcanzar el máximo de su potencial, en el caso de los alumnos con altas capacidades.

Hay medidas muy generalizadas como los apoyos, dentro y fuera del aula o los desdobles.

De hecho en la práctica la mayoría de los centros organiza habitualmente ambos tipos de medidas, pero hay otras que no se utilizan tanto.

Veamos algunas medidas ordinarias (no excepcionales) para ayudar a los alumnos a superar dificultades, conseguir el éxito escolar y evitar la repetición de curso:

Apoyos y refuerzos

Son términos que se utilizan indistintamente o en ocasiones se habla de apoyos cuando se hacen dentro del aula y refuerzos cuando se hacen fuera.

Los apoyos deben ser, siempre que se pueda, inclusivos, dentro del aula, para evitar tanto la estigmatización del alumno al que se saca del aula, como la propia percepción del alumno de que no puede trabajar lo mismo que el resto o que solo puede avanzar con una ayuda específica.

Todo el profesorado puede participar en este tipo de apoyos, no hace falta que sea el de PT o de AL y si se interviene dentro del aula no es necesario, ni siempre conveniente, que se atienda a un único alumno sino que es más recomendable utilizar la figura del segundo docente en el aula para organizar la clase en modo de codocencia como luego veremos.

Los apoyos deben planificarse adecuadamente para que sean útiles.

Lo que no siempre se hace.

La programación debe hacerse teniendo en cuenta las horas en las que vamos a tener un apoyo en el aula para planificar las sesiones en las que los alumnos van a necesitar más ayuda de los docentes y tener previsto qué hará el docente que entre a hacer el apoyo.

De hecho lo más recomendable es que el docente de refuerzo se encargue del grupo-clase para que el tutor, que es quien mejor conoce las dificultades que pueda tener uno o un grupo de alumnos de sus clase, pueda darles una atención más personalizada que les ayude a llevar el ritmo del resto.

Es un desperdicio tener el apoyo y hacer por ejemplo un control escrito. O que llegue al apoyo al aula y pedirle que haga fotocopias o encuaderne trabajos. Hay que recordar que el apoyo es al grupo, al alumnado, no al profesor.

Desdobles

Los desdobles consisten en organizar grupos más pequeños en una, varias o para todas la materias.

Es una forma de reducir el número de alumnos por grupo y puede utilizarse para todas las áreas, es decir haciendo por ejemplo tres grupos de un determinado nivel en lugar de los dos que tiene el centro (en el caso de dos líneas).

Este tipo de estrategia tiene muchas ventajas ya que al hacer grupos más pequeños (en vez de dos de 25 podríamos tener tres de 16-17 alumnos) el profesorado puede atender de forma más individualizada a las necesidades de los alumnos. Pero lógicamente consume muchos recursos ya que necesitamos 25 horas de profesores para cada grupo (algo menos descontando los recreos).

Por eso en muchos centros se opta por desdoblar en algunas áreas pero no en todas, priorizando sobre todo las instrumentales.

Hay también otro tipo de desdoble muy interesante que suele utilizarse con las horas de Educación Física si se dispone de suficiente profesorado.

Se trata de que el profesor de Educación Física se lleva a la mitad de los alumnos de cada clase de un determinado nivel (por ejemplo la mitad de los alumnos de 3º A y la mitad de 3º B) y el resto se queda con el tutor que aprovecha para trabajar con ese pequeño grupo.

Cada nivel en el que apliquemos este desdoble necesita el doble de sesiones de EF ya que en cada una de ellas va solo la mitad de los alumnos por lo que, como decía, depende de que tengamos horario suficiente de EF.

El primer tipo de desdoble se suele reservar para aquellos casos en los que los grupos son muy numerosos y en los que se dan circunstancias que determinan mayores necesidades de apoyo de lo habitual (alumnos con necesidades de compensación u otras necesidades específicas de apoyo educativo, alumnado extranjero con desconocimiento de la lengua o lenguas vehiculares, grupos con falta de hábitos, problemas de convivencia, etc.).

Los dos tipos es habitual utilizarlos para reforzar aquellos aprendizajes que se consideran instrumentales o que a juicio del docente requieren ese tipo de atención más personalizada.

También para aquellas actividades que se pueden realizar mejor en pequeño grupo.

Lo que sería una mala práctica es utilizar esta estrategia, que como hemos visto consume recursos docentes, para seguir haciendo en el aula lo mismo que haríamos con el grupo completo.

Es decir, utilizar los desdobles y dar una clase magistral y que los alumnos hagan deberes en sus cuadernos es hacer un mal uso de los recursos del centro.

Codocencia o docencia compartida

La codocencia es una estrategia fantástica que cada vez se ve en más centros.

Consiste, como su nombre indica, en que dos o más docentes comparten la docencia en una materia o en un grupo concreto.

Comparten, es decir, no hay un profesor responsable y otro “de apoyo”, sino que entre ambos realizan todas las tareas docentes, planifican las propuestas, explican o atienden a los alumnos en el aula y evalúan los aprendizajes.

Es una estrategia que da muy buenos resultados y que permite una mayor atención a los alumnos. 

Y entre otras muchas ventajas tiene la de romper la estructura tradicional del aula y ampliar de forma muy significativa las posibilidades metodológicas.

Y la posibilidad de aprender mucho de los compañeros, lo que es una potente herramienta para la mejora docente y que en nuestro sistema no se utiliza demasiado porque existe cierto pudor a dejar que otros docentes entren en nuestra clase, pero es una actitud que por suerte estamos superando.

Ya hablamos de ella en este post, te recomiendo leerlo si quieres aprender más sobre la codocencia.

Ámbitos

La agrupación de materias en ámbitos también es una medida que permite dar una mejor respuesta a la diversidad del alumnado que la enseñanza organizada en áreas o materias que funcionan como compartimentos estancos, reduce también el número de profesores que atiende un grupo, por lo que se considera una medida que facilita la transición de Primaria a Secundaria cuando se aplica en 1º de la ESO.

Trabajar por ámbitos significa que integran dos o más áreas/materias (por ejemplo matemáticas y ciencias de la naturaleza; música y ciencias sociales; valenciano y castellano…) y se diseñan situaciones de aprendizaje teniendo en cuenta las competencias específicas y los contenidos de ambas.

Al trabajar por ámbitos las situaciones de aprendizaje que se dan en el aula resultan contextualizadas y por ello más significativas para el alumnado lo que facilita la adquisición de las competencias propuestas, la comprensión de contenidos que se van a trabajar en el aula, el aprendizaje por apoyo entre alumnos, etc.

Aunque el trabajo por ámbitos “suena raro” en realidad no es tan infrecuente. En Infantil por norma general se trabaja por ámbitos; cuando se trabajan proyectos en cualquier etapa se suele implicar más de un área, y en la ESO en algunos centros hace años que se ha puesto en marcha el trabajo por ámbitos, como en la Comunidad Valenciana donde durante varios cursos se ha trabajado en 1º de la ESO de forma generalizada.

El tema de los ámbitos es muy interesante, aunque no exento de dificultades, y lo trataremos más a fondo en otra ocasión.

Relacionados con los ámbitos tenemos los proyectos interdisciplinarios. En la comunidad valenciana tienen horario lectivo propio por lo que también trataremos de desarrollarlos más adelante.

Metodologías activas

Hablar de los ámbitos nos lleva a reflexionar sobre las metodologías activas en general.

Las metodologías activas son aquellas que otorgan un papel activo al alumnado, es decir, las que superan el modelo de clase magistral en la que el profesor explica y el alumnado atiende y que se basa en el paradigma de que el conocimiento se transmite.

Al aplicar metodologías activas: aprendizaje basado en proyectos, aprendizaje basado en solución de problemas, análisis de casos, aprendizaje cooperativo, o propuestas como talleres o estaciones de aprendizaje, el alumno se implica activamente en su aprendizaje y el docente asume un papel diferente, no solo de transmisor del conocimiento sino de facilitador y guía del aprendizaje.

Este tipo de metodologías también permite una mayor inclusión en el aula porque todos los alumnos pueden estar trabajando en las mismas tareas aunque con diferentes apoyos y con actividades más o menos adaptadas a sus necesidades.

Diseño universal de aprendizaje, DUA

Por último, aunque no es exactamente una medida de inclusión sino un enfoque, no podemos terminar de hablar de medidas orientadas a ayudar a ayudar a los alumnos a superar las posibles dificultades que puedan encontrar en su proceso de aprendizaje, sin mencionar el DUA.

El DUA consiste en diseñar todo el proceso educativo pensando en la diversidad que existe en las aulas, de forma que el proceso sea equitativo, flexible, de uso simple e intuitivo, que toda la información sea perceptible, tolere y reconduzca el error, suponga poco esfuerzo físico y con dimensiones que permitan un uso adecuado a todos los alumnos.

Este enfoque es muy completo e interesante te recomiendo buscar información y aprender más sobre el DUA si te interesa la escuela inclusiva.

Para empezar te dejo la guía Diseño Universal y Aprendizaje Accesible, Modelo DUA-A elaborada por la Conselleria de Educación valenciana y el CEFIRE de Educación Inclusiva.

Cómo elegir qué medidas utilizar para reducir las repeticiones

Como hemos visto son diferentes tipos de medidas los que podemos implementar, pero no todos funcionan igual de bien o no son adecuados en todos los casos.

Para determinar qué estrategia utilizar es imprescindible que hagamos una buena evaluación del proceso de enseñanza de forma que podamos identificar qué estrategia es la más adecuada en nuestro contexto y para las necesidades de nuestros alumnos. Y con cuál obtenemos mejores resultados.

Con frecuencia esta evaluación no se hace o se hace de forma inadecuada.

Si evaluamos solo por la percepción que tiene el profesorado siempre nos vamos a encontrar con que se valoran muy positivamente los desdobles, porque obviamente es más fácil gestionar un aula con pocos alumnos. 

Pero con este tipo de evaluación no sabemos si en realidad es la medida con la que mejoran más los aprendizajes de los alumnos.

Deberemos utilizar otras valoraciones (deberemos preguntarnos: ¿aprenden mejor en desdoble o con codocencia?, ¿mejoran los aprendizajes cuando los alumnos reciben apoyos o cuando se trabaja por ámbitos?…), y tener en cuenta los resultados de los alumnos, para determinar qué medida conviene implementar.

Lo más recomendable es elaborar una serie de indicadores que nos permitan recoger datos objetivos de las diferentes medidas que podemos implementar y utilizarlos, junto la valoración de los resultados de aprendizaje, y también con la valoración que hagan los docentes según su experiencia en el aula, para decidir, a nivel de equipo docente qué medidas son las más adecuadas en cada caso.

Además de las medidas que hemos visto hoy hay otras actuaciones que pueden implementarse a través de los planes de mejora de los centros, y por supuesto, las actuaciones de éxito, por lo que seguiremos hablando del tema en otros posts.

En definitiva se trata de buscar las estrategias que permitan una educación inclusiva, desde el diseño del proceso de enseñanza-aprendizaje (enfoque DUA) hasta las estrategias metodológicas, los recursos y las propuestas que permitan que todo el alumnado consiga los objetivos educativos propuestos.

Y para ello la repetición de curso no es ni la única ni la mejor apuesta para conseguir el éxito educativo. No temas hacer cosas diferentes 🙂

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